EEUU expulsa a 60 diplomáticos rusos y catorce gobiernos de la UE anuncian medidas contra Moscú

El presidente Donald Trump ordenó que 60 diplomáticos rusos considerados por Estados Unidos como espías abandonen el país en respuesta al envenenamiento con gas nervioso de un ex espía ruso en suelo británico, además del cierre del consulado ruso en Seattle, dijeron altos funcionarios de la administración hoy lunes, en momentos en que varios estados europeos preparan medidas similares.

Las expulsiones están entre las medidas más agresivas de EEUU contra Rusia bajo la administración Trump, que había buscado estrechar lazos con el presidente Vladimir Putin.

Los funcionarios calificaron el envenenamiento del 4 de marzo contra Sergei Skripal y su hija en Salisbury, Reino Unido, un ataque contra el aliado más cercano de EEUU y un descarado intento de asesinar a un ciudadano inglés en suelo britanico.

Según las fuentes, existen más de cien agentes rusos de inteligencia encubiertos como diplomáticos en EEUU y calificaron el número como inaceptable.

Por su parte, catorce países de la Unión Europea tomaron acciones coordinadas hoy en respuesta al supuesto ataque. La medida es una señal de unidad en la UE a medida que los estados se alinean tras uno de sus miembros tras la agresión de Moscú luego de la arrasadora victoria de Vladimir Putin en las últimas elecciones presidenciales.

Los estados miembros de la UE, incluyendo Francia y Alemania, lanzaron una respuesta coordinada contra el Kremlin luego de que el bloque de 28 miembros concluyera la semana pasada que era “altamente probable” que Rusia fuera responsable por el ataque químico y que no existía “ninguna otra explicación plausible”. Rusia, sin embargo, niega estar involucrada en el incidente.

La primera ministra británica Theresa May condenó este mes a Rusia por el ataque con un agente nervioso que dejó en estado crítico a un ex espía ruso y su hija. Un oficial de la policía británica también quedó hospitalizado. May dijo que los 23 ciudadanos rusos que expulsó del país eran espías encubiertos y pidió la cooperación de otros países en su campaña por castigar a Moscú.